
'Caída en picado' de calidad y cantidad: Reportan que Ucrania afronta un 'shock' por escasez de drones FPV

Decenas de jefes de unidades del Ejército ucraniano aseguran sufrir gran escasez de vehículos aéreos no tripulados FPV (de pilotaje con visión remota), culpando a las autoridades del país de los retrasos en las entregas, de los desequilibrios de la distribución y de la cuestionable calidad de los aparatos, informó este jueves la BBC.
Según destaca el medio, los drones son muy importantes para mantener la linea del frente ante la intensa presión de las Fuerzas Armadas de Rusia, que ha aumentado últimamente, lo que ha permitido al Ejército ruso hacer considerables avances en Donbass y otras partes del frente. Sin embargo, los oficiales se quejan del "descenso" de la calidad y cantidad de aparatos, lo que impide crear una así llamada 'zona muerta' de 10-15 kilómetros de profundidad en la línea del frente.
"Me gustaría 'dar las gracias' al Ministerio de Defensa: durante tres meses, la Tercera Brigada de Asalto no ha recibido ni un solo dron FPV. Tenemos escasez de ellos. Sin los FPV suministrados por el Estado, nos habríamos quedado secos en estos tres meses", declaró a mediados de mayo Andréi Biletskiy, comandante de una brigada de asalto de Kiev. La afirmación desató un revuelo y solo después la unidad recibió el armamento necesario.

Sin embargo, este caso no ha resuelto el problema sistémico, asegura el medio. La situación se complica aún más debido a que el sistema de suministros sigue un modelo mixto de dotación de drones 30/30/30: las unidades militares reciben alrededor de un tercio de los drones directamente del Ministerio de Defensa, mientras que el resto son comprados por ellas mismas o recibidos de fondos de voluntarios. Y esta primavera la parte problemática fue la correspondiente a las entregas del Estado de forma centralizada.
"Falta de profesionalidad"
Según el capitán ucraniano Yuriy Fedorenko, entre las razones objetivas figuran retrasos burocráticos en la financiación y la contratación de los drones para este año. "Esto se parece a lo siguiente: hoy tenemos el dinero, porque nuestros socios nos lo han dado, lo hemos pedido, pero lo que hemos pedido estará en el Ejército dentro de dos meses", explicó. Además, el militar ucraniano incidió en que las razones subjetivas se centran en la "falta de profesionalidad" de algunos funcionarios en algunas fases del proceso.
El comandante de un batallón de sistemas no tripulados, Serguéi Varakin, también confirmó el "déficit" de drones. "Si había hostilidades activas, podíamos permitirnos utilizar 100 drones al día, y su calidad era más o menos normal [...] ¿Cuál es la situación ahora? Ahora, una brigada solo puede recibir entre 200 y 300 FPV al mes", declaró al medio.
Asimismo, el militar destacó el desequilibrio en la distribución entre diferentes unidades por las estructuras responsables de la logística en el Estado Mayor: algunas unidades reciben un número mínimo de drones, mientras que otras están más o menos provistas de ellos. "Tenemos un suministro selectivo. No es posible que todos los batallones de drones tengan las mismas condiciones", afirmó Varakin.
"Hacer un Frankenstein"
El principal problema que señalan los militares entrevistados es la deficiente calidad de los drones FPV que el Gobierno ha proporcionado al Ejército recientemente. Esta situación se da en un contexto donde se observa una mejora en los sistemas no tripulados rusos. "Odio admitirlo, pero el enemigo ha avanzado mucho en el uso de drones. Si antes eran unas pocas unidades, ahora es una operación a gran escala", señaló Yegor Firsov, exdiputado y actual sargento jefe de una compañía de drones de ataque.
Por su parte, Varakin asegira que recibe numerosos drones FPV de baja calidad, lo que obliga a los soldados de su batallón a invertir su propio dinero en piezas necesarias, lo que requiere mucho esfuerzo y recursos financieros. "Quiero sacarlo de la caja y ponerlo a volar. No quiero llevarlo a un taller y hacer de él un Frankenstein para que pueda volar en algún sitio", dijo.
Otro desafío deriva de la falta de munición para los drones FPV, que se fabrica a mano en talleres que cuentan con brigadas para modificar manualmente los drones cerca del frente. Resultado de ello, mueren muchos especialistas, obligados a fabricar munición con medios improvisados.
Según el reportero de guerra ruso Yevguényi Poddubnyi, el propósito de tales noticias difundidas por medios de comunicación es que Rusia baje la vigilancia e intentar convencer al país euroasiático de que Ucrania prácticamente ha perdido una de sus armas más formidables. "No lo creemos, por supuesto. La situación sobre el terreno no lo confirma. Incluso si la intensidad del uso de drones por el enemigo ha disminuido en una sección concreta del frente, se trata de un fenómeno temporal", señaló, enfatizando que no hay que olvidar los miles de aparatos que Ucrania recibe de voluntarios de todo el mundo y en paquetes oficiales de ayuda militar de los países occidentales.